lunes, 19 de marzo de 2012

Museo de mi mismo

Alucinado me he quedado con una aplicación para Facebook que ha publicado Intel. Se llama "Museum of Me",y podéis probarlo pinchando en el enlace anterior. 













¿Y como funciona esta aplicación? Bueno pues lo primero como suele ser habitual con cualquiera de estas Apps, hay que permitirles que accedan a tu perfil de Facebook y vender tu alma (tu alma de Facebook se entiende) a Intel. Una vez que ya has renunciado a todas tus garantías de privacidad y te has quedado en pelotas ante Intel, la aplicación empieza a husmear en tu perfil de Facebook, recopilando todas tus fotos, contactos,  vídeos, enlaces y palabras publicadas por ti, y realiza un vídeo preciosísimo con todo esto.

Este vídeo muestra tu vida social en Facebook desde el punto de vista de un museo, tu propio museo, donde desfilan ante los ojos de los visitantes toda tu actividad en Facebook. La verdad es que el efecto es bastante bonito y viéndolo uno se debate entre la maravilla y el acojone, ya que te entran ganas de darte de baja del Feisbuk.




Y eso que yo no suelo usar Facebook muy a menudo, pero para alguien con una intensa actividad en esta red social, la verdad es que la experiencia de visualizar este vídeo debe ser impresionante. 
Así que os animo sin dudarlo a probarlo ................. .................... si os atrevéis ¡¡claro!!



 


jueves, 5 de enero de 2012

2012: ¿El año del fin del mundo?

Por fin estamos en el año 2012, un año para el que muchos han realizado predicciones apocalícticas, incluso los mayas, o eso dicen algunos. Y por eso en esta entrada de mi blog voy a analizar cuales son las amenazas más probables que puedan destruir a la humanidad, incluyendo o no a nuestro planeta.

De entrada voy a aclarar que no creo de ningún modo que el mundo se vaya a acabar este año, por lo que mi análisis se centrara en tratar de encontrar al menos una amenaza cercana en el tiempo, que tenga bastante probabilidad de acabar con la humanidad, o afectarla de forma drástica.

Está claro que la amenaza más probable es que nos destruyamos a nosotros mismos, de hecho aún hay un arsenal nuclear de sobra como para poder conseguirlo este mismo año y así dar por buenos las predicciones catastrofistas para este 2012. Y a plazo más largo siempre está el riesgo de que el cambio climático acabe siendo irreversible, o la creación de algún virus o bacteria que afecte de forma contundente a la humanidad o a los recursos alimenticios disponibles.

Pero obviando nuestra capacidad auto destructiva, de todas las posibles catástrofes que se pueden dar, ¿cual es la más probable que se pueda dar en un plazo cercano en el tiempo, pongamos en este milenio?

Está el clásico del asteroide, cometa u otros objetos celestes que puedan impactar contra la Tierra. Pero en principio este lo podemos detectar, e incluso si actuamos con margen de tiempo suficiente a lo mejor se podría hacer algo para desviar el pedrusco.

Luego está la posibilidad de que pudiera haber un incremento brutal de la actividad sísmica en el planeta, que además de diezmarnos directamente,  causara un cambio climático repentino en el planeta que destruyera nuestra civilización. En ese sentido en 2011 la Tierra ha estado bastante movidita (Fukushima, Turquia, erupciones submarinas en el Hierro), aunque no creo que de ahí pasemos en este 2012 a una catástrofe global.


Otra posibilidad es que estalle una supernova a unos pocos años luz de nosotros, con la mala fortuna que alguno de los polos de su eje (que es por donde sale expelido un chorro masivo de energía conocido como explosión de rayos Gamma) esté orientado hacia nuestro sistema solar. Dependiendo de la distancia este chorro de energía podría desde ser simplemente una curiosidad astronómica, a destruir toda nuestra capa de ozono, o incluso arrasar el planeta entero.


Todas estas catástrofes y otras muchas otras que se me ocurren, podrían darse en cualquier momento..... o no darse en cientos, miles o millones de años.


Así que buscando información me encontré con una amenaza que si que podría hacerse realidad en unos pocos cientos de años. Está relacionada con la actividad solar. Ésta viene definida por ciclos de unos 11 años de duración, y se espera que en 2013 el Sol entre en la fase de actividad máxima del ciclo en el que está actualmente. En el pasado los únicos efectos conocidos de las tormentas solares era producir bonitas auroras boreales, en latitudes mucho más bajas que las normales. Pero en las últimas décadas con el gran impulso tecnológico que hemos tenido, estas tormentas han afectado  a todo tipo de equipos electrónicos, fundamentalmente a los satélites en órbita, ya que son la primera línea que recibe esta radiación, pero también a infraestructuras ubicadas en tierra, especialmente a las redes de energía y de telecomunicaciones.

Ante esto una de las preguntas clave que surge es: ¿los picos máximos son similares en intensidad en todos los ciclos, o se puede dar algún pico de intensidad muy superior a la habitual (u otros eventos de alta actividad que no coincidan con la fase de máxima actividad el ciclo)  que pueda afectar de forma  masiva a los equipos electrónicos?


Pues la respuesta es que sí, que al menos hay constancia de un evento así. Recibe el nombre de la fulguración de Carrigton, en honor a su descubridor, y se produjo hace unos 150 años. El 28 de Agosto de 1859 el Sol empezó a llenarse de múltiples manchas solares. Richard C. Carrigton fue un astrónomo aficionado británico, que ante la inusitada aparición masiva de estas manchas solares, se encontraba el día 1 de Septiembre de ese año observando el Sol y realizando dibujos de esas manchas. A las 11:18 observó un enorme estallido de luz blanca que salía de dos puntos del grupo de manchas. Aproximadamente 17 horas y 40 minutos más tarde, la eyección alcanzó el campo magnético de la Tierra deformándolo, con lo que las partículas solares que lograron traspasar este campo al llegar a la alta atmósfera, causaron auroras boreales incluso en latitudes tan bajas como en Roma, Madrid o incluso en el Caribe.



Desde el punto de vista tecnológico el impacto no fue muy grande, debido a que no había satélites, redes eléctricas y apenas habían transcurrido 15 años desde que se realizó el primer tendido telegráfico de larga distancia. Aún así el impacto sobre las líneas telegráficas fue brutal. Prácticamente se perdió la totalidad de la red telegráfica, que quedó cortada y cortocicuitada por culpa de la fulguración, causando estos cortocircuitos múltiples incendios tanto en Europa como en Norte América.


Si una fulguración tal se produjera hoy en día los efectos serían debastadores. Probablemente se perdería un porcentaje altísimo de satélites, y las líneas de telecomunicaciones y de energía quedarían arrasadas, además de todo tipo de equipos electrónicos que existen hoy en día que podrían dejar de funcionar. El número de incendios que se produciría por todo tipo de cortocircuitos sería muy superior  al registrado en 1859, con lo que los servicios de emergencia se verían desbordados, agravado con el hecho de que seguramente estos no dispondrían de medios adecuados para comunicarse y coordinarse. Pero la peor parte es la que se llevarían los transformadores eléctricos que se usan en las centrales eléctricas. Si sus núcleos fueran afectados, quedarían totalmente inoperativos. Si esto se diera en un número bastante alto de transformadores, podría darse el caso de que no hubiera apenas repuestos para sustituirlos, por lo que la restauración del suministro eléctrico para la mayoría de la población no podría darse en un período corto de tiempo. Esto podría hacer que entráramos en un "invierno tecnológico", que si se alargara lo suficiente hiciera caer a nuestra civilización en el caos más absoluto.


Ante esto se nos plantea la siguientela pregunta: ¿existe alguna posibilidad de que el pico máximo de actividad solar esperado para el 2013, sea como el observado por Carrigton? Dentro del los distintos ciclos solares de 11 años de duración, cada 50 años se produce un pico con tormentas solares de intensidad muy superior, aunque no tanto como la observada por Carrigton en 1859. La última tormenta solar relativamente fuerte se produjo en 1960, por lo que parece que en 2013 ya va tocando otra. ¿Podría ser que este año tocara una de intensidad similar a la de Carrigton? No parece probable. Primero,  porque este evento no parece estar asociado a los picos máximos de actividad solar de los ciclos de 11 años, sino que se dió precisamente cuando el Sol estaba en uno de sus fases de baja actividad dentro de ese ciclo. Segundo,  porque si bien es cierto que el único evento de este tipo documentado es el de 1859, análisis realizados en el hielo de la Antártida y Groendlandia, han relacionado esta fulguración con un incremento muy brusco de la presencia de nitratos en las muestras del hielo depositado en dicho año 1859. Examinando las muestras de hielo de otros años, se ha visto que un incremento tan brusco sólo se da cada 500 años. Por tanto parece que de momento nos vamos a librar, ya que en 350 años no debería haber otra fulguración similar a la observada por Carrigton, pero aún así 350 años es un tiempo bastante corto desde el punto de vista Cosmológico, por lo que para mi esta es una de las amenazas más factibles a la que se enfrenta la humanidad durante este milenio. Esperemos que para entonces estemos preparados....... si aún estamos por aquí.